No confundir derechosos con derechistas; y mucho menos con derechoides. Es un lío, lo comprendo, y no soy quién para desenredar la madeja. Pero voy a intentarlo
Bien cabe, no lo duden, una referencia; tomemos como base para construir el edificio, una argamasa inequívoca: el dinero. Dicho de otra forma, el poder.
El derechista está a la defensiva, es conservador, y en esa línea no tiene reparos en aparentar lo contrario. Por ejemplo "Ciudadanos".
El derechoso, va a la ofensiva; es partidario de banderas, símbolos, canciones y discursos dogmáticos. Son correosos y solo se arrepienten en casos muy singulares. No engañan. Son -por lo general- gente honesta. Pero...si se alzan con cierto poder se vuelven negociadores. Antes, no. Parece -y digo parece por carecer de elementos de juicio- que VOX se inclina en favor del tente tieso.
El, derechoide quiere el poder por el poder y se gasta "la tira" por conseguirlo. Saben que la ocasión es corta, que el dinero vuela y que el peligro está en que te pillen con el carrito de los helados. Y si les pillan -como, es el caso- pagan justos por pecadores. No hacen falta nombres ni descubrir protagonistas. ¡Ahí están!.
Pueden parecer capaces de unirse. No lo duden. Darán el espectáculo. En la "Sexta" se frotan los callos. Pero no se unirán en serio.
¡Ya se verá!
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