sábado, 29 de febrero de 2020

SIN MIEDO A LA VERDAD (15)

     No hay duda alguna: cuando se abrió el aeropuerto de Foronda, se acercaron a Vitoria las empresas interesadas en los negocios a culminar  velozmente. Estábamos en los comienzos de una nueva era, último grito: la globalización del planeta llamado Tierra.
     Esto quiere decir que cualquier ser humano dotado de medios modernos y con dinero para pagarlos, podía adquirir, por ejemplo,  un traje a la medida que le confeccionaban en Londres sin moverse de  su casa. En Vitoria, no pensando en ello, se había dado un paso muy acertado  para facilitar este y otros progresos a distancia que se palparía por los comerciantes y otras fuerzas vivas a  bote pronto.
     Los pudientes de Bilbao, cuya identidad no hace al caso, se olieron la tostada. Siendo como eran en los ochenta del pasado siglo los más fuertes de la camada, pudieron imponer sus "derechos". Y sin romper una puñetera jícara, Foronda llegó a estar cerrada para inutilizar del todo sus aspiraciones.
     No me gusta personalizar pero fui testigo directo de cómo desde instituciones alavesas tales que su Diputación Foral tardo franquista, se izaba la "ikurriña" y cómo se aceptaban,  sin tachas, por los recién llegados,  toda suerte de espacios útiles, también forales. No dieron ni las gracias por el gesto de anticiparse. El derecho de asentarse y luchar en buenas condiciones en defensa de sus ideas no puede ser valorado. Nade hizo el cálculo, nadie sabe de donde salió el dinero... abundante. Sí se dijo  que Vitoria-Gasteiz sería la Capital de Euskadi; se lo habían ganado los alaveses. Luego ¡ni caso!
     Merece la pena recordar estos pormenores dignos de ser estudiados. En Vitoria se nota que estamos atascados con señales decadentes, pero pocos se dedican a estudiar las causas. Ni siquiera el centro-derecha que anda bordeando fueros ha sido capaz de pedir justicia constantemente para que el aeropuerto de Foronda funcione a todo gas.
     Es -hoy por hoy- la única salida airosa para revitalizar a la provincia pobre de la Vasconia rica.
     Les explicaré cómo.

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