viernes, 31 de marzo de 2017

TERAPIA CONDUCTUAL PARA POLÍTICOS

     Para un tema tan delicado como el que voy a tratar es exigible la mayor claridad. Terapia, quiere decir, tratamiento de una enfermedad. Conductual, significa manera de comportarse. Políticos son los que gobiernan o aspiran a gobernar un país.
     Demos comienzo a esta divagación citando a los políticos. Creo que los más influyentes, para la buena marcha de un País, están en el Parlamento. Es donde se trabajan todas las leyes. A ellas ha.  de ajustar su conducta la ciudadanía. También interesan los miembros del Gobierno, ejecutores y vigilantes del cumplimiento de esas leyes
     ¿Quiere decirse,  siguiendo un orden, al hablar de terapia, que los políticos están enfermos? No. Quiere decirse que un porcentaje por determinar,  de tales políticos, se comportan como netos psicopáticos.
     Leo en Wikipedia: "Los psicópatas tienden a crear códigos propios de comportamiento, por lo cual solo sienten culpa al infringir sus propios reglamentos y no los códigos sociales comunes". Dicho de paso, hay quien opina que la psicopatía no es una enfermedad.
      Veamos: uno cualquiera de los miembros de la Cámara piensa, según su código, que puede plantarse con dos retratos ante la banqueta de un ministro,  y allá se va con naturalidad y desparpajo; su código se lo autoriza. Otro  se frota de gusto la sesera, porque la ceremonia se la suda. Hasta los hay quienes proclaman que no son españoles... ¿Qué pinta allí un extraño al país?
      ¡Y póngase a temblar! No es nada lo del ojo si, por su propio código, un parlamentario entiende que ha llegado su hora: la de la  hacerse rico en poco tiempo y por narices. O la de ser Presidente del Gobierno, al precio que fuere y por la vía del "no", conforme se lo indica su código. Es peligroso.
       Están de moda las primarias: sirven para poco y nada bueno y se usan para la selección de  futuros políticos. No es lo propio.
      Esa es tarea de psiquiatras.    

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario