miércoles, 7 de octubre de 2015

DIVAGACIONES DESDE VASCONIA LXXI

     LA REALIDAD EDUCATIVA EN ESPAÑA. Una entidad, PIAC, que suele realizar encuestas para indagar sobre el índice de preparación de adultos -entre 16 y 65 años-residentes  en los países integrados en la OCDE, entre los cuales está España, publicó los resultados de la ejecutada durante el año 2013.
     Esta encuesta nos indica que la población española comprendida entre esas edades,  ocupó el penúltimo lugar de los países encuestados de la Unión Europea en el epígrafe referido a "comprensión de lectura" con 21 puntos por debajo de la media del conjunto mencionado.
     Los resultados obtenidos por los españoles en "matemáticas"  fueron aún peores, España se clasificó a su representación a la cola de todos los concurrentes haciendo el número 23 de los encuestados. La mayoría de los adultos españoles  -según estos datos- no entienden el gráfico de  la factura de la luz, ni son capaces de encadenar cálculos aritméticos de forma correcta para hallar el precio final de una compra. Supongo que se refieren a la aplicación de las cuatro reglas.
     Los políticos suelen adularnos diciendo que los españoles somos muy listos, cuando realidad es que estamos atrasados y esto repercute en lo mucho que los jerifes abusan desde la esfera oficial, en perjuicio del sufrido contribuyente. Y por otro lado, la ignorancia favorece a la picaresca. Si ser pícaro equivale a ser listo, estamos a la altura  de los protagonistas del patio de Monipodio
     Habría que ensayar  la libertad de enseñanza, aunque fuera tímidamente, y  establecer algún plan de competencia entre centros docentes. Por ejemplo el cheque escolar.
     ¿Pero es que no hay libertad? -se preguntará más de uno. Sí y no.  Es una libertad neutralizada por disposiciones oficiales, que en muchos casos se traduce en un adoctrinamiento descarado... aunque se nos quiera hacer creer lo contrario. Libertad de enseñanza de la buena solo la disfrutan los más pudientes en centros de enseñanza privados y de pago, no sujetos a subvenciones o ayudas oficiales.
    Ahora bien, ¿qué es eso del cheque escolar?
     


 

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