miércoles, 18 de febrero de 2015

LOS DEL PLAN VILLALOBOS.

      El Plan Villalobos,(D. Filiberto Villalobos, Ministro de Instrucción Pública  en 1934) era una esperanzadora reforma  de la enseñanza secundaria española, a la que nos tuvimos que acomodar los que entonces empezamos el bachiller. En el primer curso coincidimos, en el único Instituto de Vitoria, cerca de doscientos alumnos. Los catedráticos y profesores, poco amigos de la puntualidad, llegaban siempre tarde y daban comienzo a las clases con la costumbre rutinaria de   pasar lista. Se perdían así cuarenta minutos de la hora lectiva y los veinte restantes  se reservaban para que dieran la lección un par de alumnos. Así se nos iba el curso y, pese a todo,  tenia uno que ser muy zoquete para no aprobarlo. Pero el saber, saber, lo que se entiende  por saber entre cristianos, para nosotros era una incógnita. Luego vino la guerra... Mejor si pasamos página.  Menos mal que en los dos últimos años pisamos todos el acelerador por la cuenta que nos tenía.
      El Plan podía ser magnífico, pero su desarrollo,para nosotros,  fue un desastre.Yo me pasaba las horas de clase  leyendo algún libro a escondidas; lo que cayera en mis manos. Creo que eso me salvó, hasta donde la lectura puede servir a un autodidacta.
      Todo lo cual confirma que, por buenos que sean los  legisladores, es la materia prima, - el bicho y sus congéneres a los que va destinada la ley,  alumnos profesores- ,  la que hace que el resultado final sea o no una  birria.
      No obstante,  volvamos al informe Mc. Kinsey. Nos informa:  "analizados los sistemas de enseñanza de veinticinco países, para ver por qué unas escuelas tenían éxito y otras no, encontraron tres factores importantes:  1. Conseguir a las personas más aptas para ejercer la docencia. 2. Desarrollarlas hasta convertirlas en instructores eficientes. 3. Garantizar que el sistema sea capaz de brindar la mejor instrucción posible a todos los niños".
      Su conclusión fue: "1. La calidad de un sistema educativo, tiene como techo, la calidad de los  docentes. 2. La única manera de mejorar los resultados es mejorando la instrucción. 3. El alto desempeño requiere el éxito de todos los niños".
      No es extraño que para dedicarse a la docencia en Finlandia, se siga  un plan de formación al que solo tienen acceso los alumnos que alcanzan  la puntuación más alta en la enseñanza secundaria. ¿Se hace algo parecido en España? ¿Algún político no ha dicho  quiere implantar entre nosotros  una social democracia como las nórdicas?
     ¡Qué valor! Primero, tendríamos que llenar España de  nórdicos. Y aunque nos de vergüenza "no podemos". No estamos enseñados para ser como ellos. Nos va más el botellón y la fiesta a pierna suelta. Hasta en la escuela. Eso sí, por la gracia de Dios (digo yo) tenemos otras virtudes. No hay mas que ver y oír las tertulias políticas.  El mundo es ansí.  Pero los hay peores. No deja  de ser un consuelo.
  

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