lunes, 16 de noviembre de 2015

DIVAGACIONES DESDE VASCONIA

     UN TERRORISMO MAL ENTENDIDO.- Me refiero al terrorismo islámico (terrorismo yihadista, para otros) que, por  los comentarios que se escuchan, tiene unas características que no acaban de ser asimiladas por el gran público que lo padece.
     Es un terrorismo de raíz religiosa que elige sus víctimas entre desprevenidos ciudadanos que residen en países democráticos que más destacan por su tolerancia respecto a las ideas de los demás. Desde el punto de vista religioso, son países donde las mayorías  viven su fe, si la tienen, en un clima de indiferencia, que resulta ser el peor enemigo de toda organización teocrática.
     Por tanto, el terrorismo yihadista si tira con intención lo hace a sabiendas de que terminará por producirse un réplica también violenta, de cuyo alcance no tienen  noticia la mayor parte  de los mortales que pueden llegar a sufrirla.
     Los que pertenecen al mundo islámico que no comparten el terrorismo yihadista, no acaban de entender que la condena popular de los países democráticos afectados se extienda sobre todos los árabes, y claman para demostrar que la mayoría  son partidarios de la paz y la concordia.
    Los que viven en el mundo cristiano -por llamarlo de alguna manera identitaria- tampoco entienden por qué son los llamados a sufrir las consecuencias  de  un renacido fanatismo medieval.
    De cualquier forma tanto informador como se  mueve en torno a cada atentado, deberían dedicar algún tiempo a poner en claro, para conocimiento general, los orígenes y  el porqué de esta nueva Guerra Santa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario